Asaltos a panaderías es uno de los libros menos conocidos de Haruki Murakami. Se trata de un pequeño y delgado libro, de apenas 72 páginas, con preciosas ilustraciones de Kat Menschik. Dicen que es un cuento, pero no yo lo llamaría así. Quizás un relato corto, complicado, inverosímil y que te hace pensar... y mucho.
El protagonista de la historia, en su juventud, fue presa, junto con su compañero de piso, de un ataque de hambre repentino. Un ataque de hambre infinito, sorprendente e insaciable. Juntos deciden atacar una panadería. Pero el panadero les propone un trato. Podrán comer todo lo que quieran a cambio de "amar a Wagner". Y así lo hacen.
Años después, nuestro protagonista es víctima de un nuevo ataque de hambre, esta vez junto a su pareja. Pero las cosas no serán tan fáciles y su forma de saciar su hambre esta vez no será tan simple y tan limpia.
Murakami, de nuevo, nos sorprende con una inverosímil historia, protagonizada por seres solitarios y organizados, con los que empatizamos desde el primer párrafo. De lectura rápida, se trata de una pequeña joya, tanto por sus textos como por sus ilustraciones. Imprescindible para los incondicionales de Murakami.